Durante un acto litúrgico celebrado en honor al fallecimiento del papa Francisco, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, destacó el impacto positivo y el legado espiritual que el Sumo Pontífice dejó en Venezuela y en el mundo. Según Padrino López, el papa Francisco fue un defensor incansable de la justicia y la paz, y sus palabras siempre estuvieron cargadas de humanidad y profundidad.
“El papa Francisco fue un amigo de Venezuela. Él siempre rechazó los ataques contra nuestro país a través de las sanciones”, declaró el ministro, subrayando el compromiso del pontífice con los valores del respeto y la dignidad humana. Padrino López añadió que el Santo Padre fue enfático al condenar las guerras y las imposiciones de las grandes potencias hacia los países más pequeños, señalando que su mensaje siempre estuvo orientado hacia la inclusión y el entendimiento mutuo.
El ministro compartió que los venezolanos sienten al papa Francisco como un símbolo de luz y esperanza, no solo para la región latinoamericana sino también para toda la humanidad. “Lo sentimos como un gran hombre lleno de espiritualidad, humanidad y un mensaje transformador. Su legado quedará vivo entre nosotros”, afirmó, destacando la conexión especial que el pontífice tenía con el pueblo venezolano.
Finalmente, Padrino López enfatizó que la historia de la Iglesia Católica tendrá un antes y un después del pontificado del papa Francisco. “Ojalá no peque aquí al decirlo, pero habrá un tiempo antes del papa Francisco y un tiempo después del papa Francisco en la historia de la Iglesia Católica”, expresó, haciendo un llamado a los feligreses a recordar y honrar los valores que el Sumo Pontífice promovió durante su vida. Con este homenaje, se reafirma la visión del papa Francisco como un líder espiritual que marcó profundamente la consciencia colectiva y que seguirá inspirando a generaciones futuras.